Lo que debería de hacer es irme a vivir a un pueblito en las montañas donde hablen más su dialecto que el español, conseguirme un terreno, descubrir los secretos de la agricultura, cultivar unas verduras y tener unas gallinas, aprender a comunicarme con los nativos del lugar y cambiar mis verduras por algunas otras cosas, aguante el trueque, hacer un intercambio de conocimientos y dar un taller de poesía y narrativa para que me enseñen a cantar por la noche, a cazar sin armas y a curar con sus plantas.
Pero en mi mente la voz que me lo impide me dice, gasta toda tu energía para conseguir ese xbox con controles que no tienen cables. Y mi sentido de libertad responde para que querés eso si podes plantar toda la marihuana que quieras en tu terreno en la montaña y disfrutar de buenas flores.
Y la sociedad a mi alrededor opina, pero si querés irte a vivir como animal salvaje primero necesitas darme dinero o 10 años de trabajo como ofrenda.